Día de los trabajadores

30 de abril, día del trabajador rural, 1 de mayo, día de los trabajadores.

Con motivo de estas dos jornadas hacemos llegar nuestro saludo a todas las personas que participan en el mundo del trabajo.
Creemos que, con su labor cotidiana, hombres y mujeres continúan la obra de Dios creador. El trabajo humano es la vocación del hombre recibida de Dios al final de la creación del universo. Todas las personas que trabajan deben ser justamente remuneradas, tener un trabajo digno de la condición humana y gozar de un descanso que permita expandir horizontes, también en la dimensión espiritual.
En estos tiempos, los rápidos cambios culturales y tecnológicos de nuestra sociedad nos exigen una renovada atención al mundo del trabajo y nos plantean nuevos interrogantes y desafíos. Sabemos que hay temores y amenazas relacionadas con esta dimensión fundamental de la existencia humana que es el trabajo, por lo que tiene que ser siempre protegido del daño y la injusticia. En este día, la Iglesia celebra a San José Obrero. En muchas de nuestras comunidades está presente su imagen, herramientas en mano, a veces acompañado por Jesús, como un jovencito que está aprendiendo el oficio de José.
A él encomendamos a quienes cada día ganan el pan para sí y los suyos, al tiempo que con su esfuerzo generan bienes materiales y culturales que responden a las necesidades humanas. También ponemos en nuestras oraciones a quienes buscan trabajo o ven peligrar sus fuentes laborales, para que puedan encontrarlo o conservarlo y tener también allí su lugar en la vida social.

Montevideo, 29 de abril de 2025.Conferencia Episcopal del Uruguay - Consejo Permanente.